"En Ortega, la ropa nace despacio.
Entre telas naturales y materiales rescatados, se tejen emociones, memorias y el deseo de crear algo que perdure.
Cada prenda es una historia en movimiento, hecha a mano bajo pedido, siguiendo el pulso sereno de la moda lenta.
Aquí, la belleza vive en lo simple, y cada vestido es único, como quien lo habita."